Ladrillera Valledupar nació en 2009 con el objetivo de suplir la demanda de ladrillos para obras locales, en respuesta a la ineficiencia de las ladrilleras de la región. Desde sus inicios, la empresa se fue posicionando en el mercado como una ladrillera tradicional, con procesos de fabricación que inicialmente eran manuales. Con el tiempo, Ladrillera Valledupar comenzó a expandir su planta de producción, implementando energía eléctrica para sustituir el uso de diésel, lo que marcó un importante avance hacia la modernización.
En 2022, se completó la implementación de un horno túnel de cocción continua, acompañado por una expansión de la infraestructura de la planta, consolidando así a Ladrillera Valledupar como una empresa innovadora y comprometida con la eficiencia y sostenibilidad en la producción de ladrillos.
Hoy en día, somos reconocidos como una de las principales proveedoras de materiales de construcción en la región. Nuestro éxito es testimonio de cómo una pequeña empresa, con visión y perseverancia, puede convertirse en un referente en su industria, sin perder sus raíces ni su compromiso con la calidad y la comunidad.